«La reunión» de Ponygma Escape Bar (Cartagena)

En su momento, vimos en un comunicado de Facebook que La reunión de Ponygma iba a cerrar sus puertas en cuestión de días. Creyendo que era permanente, y aprovechando las vacaciones de verano, reservamos rápidamente en el único hueco que quedaba que nos viniera bien a todos y emprendimos un largo viaje en carretera hasta llegar a la Manga del Mar Menor, su ubicación original. Ahora sabemos que lo que hicieron fue trasladarse a la ciudad de Cartagena, de ahí que hayamos actualizado la reseña con la nueva ubicación. Por lo demás, nos consta que el juego es el mismo.

HISTORIA

La historia empieza con una invitación que recibís en vuestro correo electrónico para una reunión de antiguos alumnos. Nostálgicos y curiosos, aceptáis y vais al bar al que se os ha convocado. Una vez allí, una serie de eventos nos pondrán en la situación de encontrar un objeto importante para todos nosotros.

INMERSIÓN

La ambientación era sencilla, pero estaba conseguida; por un instante te planteas si no se habrán valido de un bar de verdad para hacer la sala (estamos casi seguros de que es así). No era una sala especialmente difícil, viéndolo ahora con perspectiva, pero el hecho de que fuera no lineal hacía que muchas veces te atascaras antes de tiempo, o al contrario, que no tocaras algo porque pensabas que aún te faltaban objetos. Es una de estas salas en las que es importantísimo revisarlo todo.

Hablemos de los Game Master. Sí, en plural. El primero hace el típico papel neutro para introducirte en las normas del juego, pero el segundo interactúa con los jugadores, ya que es una «pieza» de la sala en sí (no cuenta como spoiler, lo prometemos).

JUEGO

La sala carecía de elementos tecnológicos. Sus puzles eran totalmente tradicionales y hasta la forma de pedir las pistas era la de siempre: walkie. Eso sí, ese walkie no lo tienes desde el principio: te las tienes que ingeniar para sacarlo de la cajita donde está encerrado bajo llave (así que, si no lo sacas, más te vale tener una mente privilegiada y autosuficiente).