«Visita guiada» de Mental War (Elche) [SALA CERRADA]

Uno de los gatomantes iba paseando por la calle cuando, de repente, algo llamó su atención. ¡¿Una sala nueva?! No la conocíamos ni habíamos oído hablar de una nueva apertura en la zona, así que, aprovechando que estábamos todos los gatomantes reunidos, hicimos un hueco en nuestra III ruta levantina para Visita guiada de Mental War.

HISTORIA

La historia consiste en una tranquila visita guiada a la casa museo de un exdirector de la CIA. ¿Qué podría salir mal? Pese a que pueda parecer un argumento trillado, han conseguido darle una vuelta de tuerca que nos hará disfrutar como niños de esta experiencia. Mejor ir a verlo para comprenderlo.

INMERSIÓN

La ambientación es sencilla, pero efectiva. No solo encontraremos grandes e impresionantes escenarios, sino también una inmersión bastante buena que nos hará meternos en el juego y en la historia con mucha facilidad. A veces, menos es más y, en este caso, nuestro entorno nos ayudará a creernos parte de la trama del juego.

El game master es uno de los puntos fuertes del juego. Serio en ocasiones, divertido la mayor parte del tiempo y, sobre todo, pendiente. No tuvimos ningún problema con él, que supo dónde estábamos y qué hacíamos en todo momento, pese a lo complejo de su papel en este caso. Su participación fue brillante. Fue genial tanto como acompañante como por el medio de introducirnos en el juego.

JUEGO

Los puzles son algo más complejos que la media. Algunos nos van a provocar más de un quebradero de cabeza, pero con paciencia y esfuerzo podremos hallar la solución por nosotros mismos, pues no están exentos de lógica. Pero no os cortéis en pedir pista, lo importante es divertirse, y algunas pruebas tienen cierto nivel de complejidad.

La fluidez no es algo regular en este juego. ¿Qué queremos decir? Que es un juego con ritmo variable. Habrá momentos en los que todo fluya con la rapidez del rayo y otros nos tendrán enfrascados en un enigma con todas nuestras neuronas enfocadas en su resolución. Hay suficiente trabajo para todos, así que nadie va a aburrirse durante el transcurso del juego y, además, puede venir bien un segundo punto de vista si nos vemos atascados en algún momento.

La recomendamos para grupos con cierta experiencia. Los grupos pequeños quizá se vean un poco saturados de tareas y los inexpertos podrían sentir que es demasiado compleja. Sin embargo, un grupo medio no tendrá dificultades en pasar una experiencia divertidísima y retadora a partes iguales. Una de las ventajas de la sala es que pueden participar grupos de hasta ocho personas sin molestarse.