«El escondite de los mortífagos» de La fábrica (Benidorm)

Somos unos desesperaos, lo sabemos, pero teníamos mucho mono de sala de escape y, aunque estábamos esperando a que abrieran La maldición del jaguar, el siguiente juego de La Fábrica, no pudimos resistirnos a jugar El escondite de los mortífagos. Además, con lo frikis que somos de la saga y el mundo ficticio de Harry Potter, estábamos en la obligación de ir ya.

HISTORIA

El Gabinete de Magia fue atacado recientemente y, aunque a la mayoría de los mortífagos los pillaron, unos pocos consiguieron escapar. Ahora, algunos de esos pocos se pasean libremente por el callejón Knockturne (sí, con E) y alrededores, así que, a modo de favor, se nos ha pedido a unos pocos trabajadores que nos escabullamos en alguna de las tiendas clausuradas del callejón, pues se cree que en una de estas tiendas se puede encontrar información. ¿Será verdad?

INMERSIÓN

Aquí debemos señalar un punto a favor de El escondite de los mortífagos de La Fábrica con respecto a su sala hermana El plan Vladimir, y es que el comienzo nos pareció bastante más original. Seguimos sin tener un game master con el que interactuar al principio, pero eso no quita que, a través de megafonía, nos dé instrucciones y nos ponga en contexto para adentrarnos en la primera habitación.

Si hablamos de ambientación, tenemos un sabor agridulce. No empieza mal la experiencia, es cierto, pero nos encontramos con espacios que, si bien para cuatro o cinco jugadores es adecuado (no más), quedan vacíos o poco aprovechados. Es verdad que hay que ir y volver varias veces a lo largo de las estancias, pero, bueno, eso es algo que se tratará en el apartado de JUEGO. En cualquier caso, a medida que avancemos, la decoración irá siendo más sencilla.

En cuando a la game master, estuvo pendiente de nosotros y nos escuchó y respondió en todo cuanto pedimos, cosa que se agradece enormemente. De hecho, hubo un momento en el que la música estaba demasiado alta y, cuando nos quiso dar la pista por megafonía, no escuchamos nada. Por suerte, la bajó en cuanto se lo pedimos (cosa que, os lo creáis o no, no siempre pasa). Aparte, hay que decir que sí hubo algún intento de interactuar; sin embargo, exceptuando un par de detalles, no se podría decir que la interacción con los jugadores fuera su punto fuerte, precisamente.

JUEGO

,Para hablar de este apartado, vamos a empezar con lo que se dijo en la sección anterior. Hay puzles que, para ser resueltos, hay que estar yendo y volviendo a estancias anteriores, lo que nos parece genial, puesto que da la impresión de que el espacio está algo mejor aprovechado. El problema es que, cuando se termina la partida, uno se queda con la sensación de que meter algún puzle más le habría sentado bien porque el espacio, a pesar de todo, está un poquito desaprovechado.

Falta decir que los puzles son variados: mecánicos, candados y algunos un poco más «mágicos», puesto que se activan cuando se dice algo en concreto. Estos últimos son los más interesantes y los que creemos que deberían abundar en una sala de esta temática.

Por otra parte, pensamos que hay un problema con el planteamiento de algunos puzles, lo que va a hacer que baje la fluidez. Hay varios que están pensados para que nos fijemos en ciertos detalles muy concretos, cosa que puede resultar divertida y dar juego, pero hay un tipo de iluminación que no deja distinguir algunos de estos detalles, lo que va a sumar un plus de dificultad que no vemos del todo acertado. Quizá, si se incluyera una varita que funcionara como linterna o algo así, se solucionaría rápidamente ese problema.

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