-No muy bien, agente. Tengo un problema muy grande.
Bermejo parece muy desanimado. Antes de que puedas decir nada, continúa con su expicación.
-Desde que me ayudaste he estado intentando trabajar como detective privado, como tú, pero nadie confía en mí para darme un caso. Dicen que no parezco lo suficientemente serio. ¡Pero sí que lo soy! Ayúdame otra, agente 6470. ¡Por favor!
Aún tienes que solucionar el problema de la luna rota.