«Tesla’s Mystery» de Fox in a Box (Florencia)

Hoy analizamos nuestra experiencia con los primos de Fox in a box Madrid, ya que vamos a hablar de Tesla’s Mystery de Fox in a Box, pero los de Florencia. ¿Listos para nuestro análisis? Vamos a ello.

HISTORIA

Tesla murió en 1943 en la conocida habitación 3327 del New Yorker Hotel. Un día, después de su muerte, recibís, atención, señoras y señores, ¡una carta del propio Nikola Tesla! En la carta os pide que vayáis a su habitación para encontrar su último invento y compartirlo con la humanidad antes de que el FBI lo haga y quizá no consiga salir a la luz. Cuando llegáis a la habitación, el FBI ya está en camino… Y en 60 minutos llegará al lugar. ¿Seréis capaces de encontrar su último invento?

INMERSIÓN

Como en otras salas de Italia, la experiencia puede jugarse tanto en inglés como en italiano, pero, si no te defiendes en ninguno de los dos idiomas, los game masters saben algo de español, por lo que lo más seguro es que entre vosotros os entendáis sin problema. Por suerte, el juego no tiene texto alguno para leer dentro de la sala que os pueda interferir.

Nada más llegar, el game master os meterá dentro de la sala y os explicará todo lo que debéis saber para jugar. Pensamos que ese factor hace perder un poco de magia, puesto que el primer vistazo que se tiene frena con las explicaciones. Es una pena.

En cuanto al papel del game master, pues lo cierto es que no interpreta ninguno. Así que, aunque durante el juego lo vimos muy pendiente de nuestra partida, la experiencia acabó perdiendo en inmersión por no cuidar ese detalle. 

Por otra parte, la ambientación cumple, sin más. No es ningún portento, pero por lo menos es capaz de transportar a la misma habitación de hotel del inventor Tesla. Aunque el habitáculo no es muy grande, saben aprovechar muy bien el espacio.

Respecto a las pistas, se podían dar por megafonía o de una manera mucho más inmersiva, pero, una vez que se pedía una, tocaba esperar 10 minutos para pedir otra.

JUEGO

Uno de los factores que más nos gustaron fueron, sin duda, sus pruebas. Están muy integradas en la historia y pudimos encontrar algún juego muy original que no habíamos visto nunca. Cuando pasa eso, la verdad es que es algo increíble, ya que, como hemos jugado tanto, cada vez es más difícil sorprendernos.

La sala presenta un esquema jugable a caballo entre lineal y no lineal con puzles más clásicos y otros más tecnológicos. En cuanto a la fluidez, fue muy buena, a excepción de algún parón, debido a que alguna prueba nos resultó un poco más difícil.

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