Habíamos oído mucho sobre El hotel de los suicidas, de Terror Stories, pero, siendo algo asustadizos, como ya sabéis, nunca nos atrevíamos a jugarla. Un día, entonces, nos unimos a los Enanos Escapistas y decidimos hacer una ruta de terror. O, bueno, solo uno de los gatetes se unió. ¿Qué tal nos fue?
HISTORIA
En la posada DuMont, hace cincuenta años, sucedieron tantas cosas que incluso hoy en día siguen vigentes. El actual familiar DuMont la ha reabierto como El Hotel de los Suicidas, aunque sin apoyo de los vecinos, puesto que fue el lugar donde muchísimas personas se suicidaron justo 90 minutos después de su registro. Tras un incendio en el lugar, la policía cerró el recinto. Ahora, con el edificio rehabilitado como atracción, está sucediendo algo extraño. Todos aquellos que se siguen adentrando en él y descubren la historia deben sobrevivir los 90 minutos, aunque nadie lo ha conseguido todavía.
INMERSIÓN
La premisa de esta sala nos encantó desde el principio. La introducción a la historia, combinando humor y terror, fue magistral. La ambientación, desde el primer momento, es atrapante. Además, a eso se suma que los espacios están muy bien logrados y el miedo se siente de inmediato. Los efectos de sonido, música y luces se combinan a la perfección para crear una experiencia aterradora.
El papel de los game masters fue sobresaliente, profesionales y completamente integrados en la experiencia, haciéndonos pasar auténtico miedo. No tenemos una sola queja, lo hicieron a la perfección.
En cuanto a las pistas, se daban de manera acorde a la historia, aunque no de forma especialmente original. Eso sí, encajaban bien en la narrativa del juego.
JUEGO
En cuanto a los puzles, la sala ofrece una variedad interesante. Hay desde puzles tradicionales hasta otros más tecnológicos, combinados con pruebas de valor aterradoras.
Nos sorprendió la cantidad de juegos, algo poco común en salas de terror. Todos estaban bien integrados, con una dificultad media que mantenía el ritmo del juego constante. Hubo un puzle que nos pareció más lento, pero no afectó significativamente a la experiencia.
El nivel de terror es bastante alto. Aunque no es una sala física, los impactos terroríficos y el ambiente logran asustar. Si eres sensible a los fantasmas, prepárate para pasar un mal rato.
CONCLUSIÓN
El hotel de los suicidas de Terror Stories es una sala increíblemente divertida. La historia es fascinante y evoluciona durante el juego. Los game masters son excelentes y el terror está muy bien logrado. Si estás en Valencia y te gusta el miedo, te recomendamos jugarla sin dudarlo.

Pl. Monseñor Oscar Romero, 11, 46017 Valencia
https://terrorstories.com/valencia
info@experiencityvalencia.es
616 551 918
Transporte público:
Bus: líneas 9, 10, 18, 27, 99
Aparcamiento: Difícil, puede que haya que callejear un poco.