«La misión de Pandora» de Get Out Escape Room (Madrid)

Nuestra compañera estaba a punto de dar a luz y buscábamos salas que pudiéramos jugar con ella. Así, llegamos a las salas de Get Out para jugar sus tres misiones, empezando por La misión de Pandora, experiencia en la que nos centraremos hoy en esta reseña. ¿Listos para saber nuestras impresiones?

HISTORIA

El mundo de Pandora se encuentra en guerra y necesitamos unirnos para eliminar a sus enemigos. Deberéis explorar los enigmas que se encuentran en el planeta. Para lograrlo, deberéis poner a prueba vuestros sentidos e ingenio, obligándoos a pensar de forma distinta. ¿Estáis dispuestos a adentrarse en este nuevo planeta y hallar la forma de expulsar al adversario?

INMERSIÓN

Una vez entréis en la sala, la game master os sumergirá en la historia y os situará en contexto. El inicio de la sala nos pareció un poco extraño, pero, después de ese primer momento, nos encontramos con un espacio bonito, decorado artesanalmente, aunque no excesivamente grande. Nos llamó la atención que había elementos muy trabajados y otros no tanto. A pesar del tamaño, creemos que el espacio estaba bien optimizado. Éramos cuatro jugadores y nos pareció un tamaño adecuado para ese número de personas; si sois más, puede que os molestéis un poco.

Durante la partida, la game master os acompañará en la aventura dando pistas. Estuvo atenta durante la partida, pero es cierto que dentro de la sala perdía un poco el personaje que presentó al principio. Sería ideal mantener ese personaje y tratar de interactuar un poco más con los jugadores para darle más inmersión al juego.

En cuanto al sistema de pistas, habría sido genial introducir algún elemento de las películas en las que se basa, ya que eso habría destacado muchísimo.

JUEGO

La sala tiene un esquema jugable no lineal con puzles de todo tipo, tanto juegos clásicos como otros más tecnológicos. Muchos de los puzles son pruebas sensoriales donde tendremos que activar todos nuestros sentidos para resolverlas. Es una gran idea utilizar puzles de este tipo en una sala inspirada en Avatar; aunque es cierto que algunos de ellos no estaban del todo pulidos, otros nos gustaron mucho.

Esto provocaba que la experiencia tuviera momentos de fluidez algo más bajos, ya que intentar descifrar ciertas pruebas cuando costaba apreciar ciertos elementos dificultaba el juego. Sin embargo, dejando esas pruebas aparte, la sensación de juego es divertida.

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