Bien, por fin hacemos el análisis de esta magnífica y mítica sala, El testamento de Locus Fugae. Fue una de las primeras que abrió por esta zona, y lo cierto es que tardamos en ir a ella por aquello de ir dejando para el final una sala con unas expectativas tan altas, pero bueno. El resultado después de hacerla nos demostró que la veteranía puede ser un punto muy a tener en cuenta.
HISTORIA
Sois los sobrinos de vuestra recién fallecida tía Matilde, y solo obtendréis su herencia si conseguís recordar toda su vida. Reconocemos que el game master desarrollará un papel importantísimo y que sus improvisaciones darán vida (y humor, mucho humor) a la experiencia.
INMERSIÓN
La ambientación es maravillosa y entrañable. Todos tenemos una abuela/tía/mujer mayor de confianza en nuestra vida, y sabemos cómo son sus casas y su decoración. El hecho de ser un lugar tan común da para hacer de ello uno de sus puntos fuertes. Cuida al detalle cada elemento, cada nimiedad, incluso alguna sorpresa un tanto especial bajo la cama…
JUEGO
En cuanto a dificultad, no destaca por ser extremadamente alta, pero no por ello hay que dormirse en los laureles. El hecho de que no sea una sala lineal equivale a tener en cuenta siempre qué objetos encuentras para recordarlos cuando toque usarlos, que puede ser como veinte años después de encontrarlo.
Al tener este tipo de ambientación y contar esta historia, no hay cabida para puzles mecánicos, por lo que solo se puede calificar esta sala como clásica. Ojo, no por ello no tendremos acertijos originales y momentos de tensión al no saber cómo avanzar. Será en esos momentos cuando tomemos el walkie y pidamos ayuda a nuestro abogado, quien, con mucho respeto (por supuesto, es un hombre de ley), nos dará las pistas que tanto ansiamos.
CONCLUSIÓN
En fin, que a pesar de ser una de las primeras salas de nuestra zona, El testamento de Locus Fugae no se ha quedado anticuada para nada, lo cual tiene muchísimo mérito. Es más, reconocemos que es una de las apuestas fuertes para quienes vienen de fuera de la región y quieren hacer una ruta por aquí. No la ignoréis, en serio, os estaríais perdiendo una sala clásica que de verdad se recordará así, como un clásico.
Y ya que estáis, probad sus otras dos nuevas salas: Toilet y The Black Project.

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