«Caza de brujas» de The room escape (Madrid)

Por fin llegamos al final de las reseñas de la ruta veraniega 2021. Es cierto que no terminamos con Caza de brujas de The Room Escape, sino con Inframundo de A Maze in 60, porque los Gatomantes ilicitanos decidieron que era necesaria, pero ya teníamos esa reseña hecha de cuando los madrileños la jugaron. En cualquier caso, aquí os traemos nuestras impresiones de la sala antes llamada Akelarre.

Oh, y una cosa antes de contaros todo: si vais, también tenéis la opción de jugar su hall El torneo de los tres magos.

HISTORIA

Las brujas ya no respetan nada, ni siquiera los horarios socialmente aceptados. Por eso, la gente del Valle Verde está hasta los mismísimos de estas señoras de dudosa moral y ha llamado a la Hermandad del Martillo, a la cual pertenecéis, para que intervináis en el asunto. 

No vamos a deciros que seáis los mejores ni mucho menos, eso es cosa de otros miembros, pero los mandamases han pensado que sois lo suficientemente buenos como para hacer el apaño (la realidad es que no quedaba nadie más disponible, pero bueno, detalles…). El caso, ¡a por la bruja!

INMERSIÓN

Si hablamos de la ambientación, debemos reconocer que es uno de sus puntos fuertes junto al game master. Se nota el cuidado que se ha tenido con la selección de mobiliario y la colocación de los elementos, que se usaban casi en su totalidad. Debemos decir que, aunque es cierto que en la primera sala podemos encontrar algún objeto o alguna cosilla un poco más tosca, en general los acabados son bonitos y acompañan a la temática bastante bien.

Aparte, tenemos al game master, un auténtico profesional en el mundillo. La introducción fue clara y supo jugar e interactuar con nosotros, e incluso echarnos unas risas. Como habréis comprobado por la historia, es una sala que se toma en serio a sí misma hasta cierto punto.

Será también el encargado de darnos las pistas, por supuesto, y además de forma acorde. No obstante, aquí nos surge un dilema. La forma de darlas es presencial, es decir, tendréis al game master delante cuando necesitéis ayuda, pero esto, a la vez, juega en su contra, porque puede hacer que el juego se haga menos acogedor al tener a una persona más que, en ocasiones, puede llegar a ser intrusivo. A nosotros, desde luego, nos costó a veces concentrarnos. 

JUEGO

Como cabía esperar en un juego cuya temática es medievo-fantástica, los puzles con los que os toparéis son variados y en buena cantidad. Tendréis que descubrir algún código y activar varios mecanismos, por lo que hay enigmas para todos los gustos. Además, tiene la ventaja de que no es una sala lineal, de modo que habrá siempre algo a lo que ir y entretenerse.

No obstante, hay que decir que, si vais muchos, es casi seguro que algún integrante del equipo se quede de brazos cruzados más de una vez. Para evitar esto, sugerimos un grupo de 4 personas máximo, lo que hará que la sensación de fluidez no decaiga en ningún momento para ninguno de los jugadores.

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