¿Una escapada rápida a Cartagena a hacer alguna cosilla? Por favor y gracias. Siempre es un sí a este plan. Por eso, organizamos el grupo habitual de levante y nos fuimos a jugar lo que ya nos iba tocando: Allegados de Carthago Escape Room y 1000 cadáveres de Mysterium Cartagena. ¿Cómo nos fue? Pues ahora os contamos.
Pero antes, queremos que sepáis que la gente de Carthago Escape Room no tiene solo esta sala, sino que dentro de su local podéis elegir una buena variedad. Os dejamos las que hemos hecho hasta la fecha, por si os interesa: Nautilus, Game box y Pandora. Si bien esta última la hicimos en San Vicente gracias a Sin Escape, sabemos que el juego está hecho por ambos dueños, así que podéis jugarla donde mejor os venga.
HISTORIA
Ha llegado la Navidad. Es momento de juntarse con todos nuestros allegados y pasar una velada bonita y entrañable en Carthago. Todo está saliendo a pedir de boca y solo falta que se termine de hacer la cena. Uy, pero falta algo, ¿qué puede ser? Bueno, seguro que nuestro querido Rodolfo nos ayuda a acordarnos…
INMERSIÓN
Hay que recordar en este punto que este juego es un hall, de modo que la ambientación, aunque tiene sus elementos y sus toques, queda en segundo plano. Es una habitación sencilla, sin mucha ostentación y diversos detalles navideños que, aparte de decorar, formarán parte de los puzles en su mayoría.
Pero creemos que el punto importante en este apartado viene dado por el game master. Con un personaje bien construido que da bastante juego para interactuar con él, sabe ganarse al jugador fácilmente. Solo hace falta, como siempre, vivir la experiencia como merece y sentirse inmerso en el ambiente que se plantea. Aparte, por supuesto, también nos dará las pistas o, por lo menos, alguna indicación o ayuda cuando más se necesite. A nosotros nos pasó que, con un puzle un poquito más largo que el resto (no mucho), nos liamos en un punto y este, sin salir de su personaje, nos facilitó una cosilla que fue determinante para no volver a hacernos la pisha un lío.
JUEGO
A ver, en este apartado tenemos que remarcar una cosa. Este juego no está pensado en absoluto para grupos con mucha experiencia o gente que quiera un reto. Pero vamos, en ningún caso. Y eso nos parece genial. Creemos que, mientras el juego esté bien montado y la intención quede clara, como es en este caso, es totalmente válido.
Os decimos esto, porque estamos ante un hall que dura media hora y cuyos juegos son prácticamente todos de corte clásico y muy sencillos. No obstante, debemos decir a su favor que algunos tienen su punto de originalidad y están totalmente integrados con la temática navideña, cosa que no siempre se consigue y aquí sí, y con cierta facilidad además.
Aparte, la fluidez es alta en todo momento. Si en algún momento no tenéis más de un puzle por hacer, será porque habéis ido resolviendo todo casi sin daros cuenta, porque es una sala no lineal en la que no da para atascarse en casi ningún sitio. De hecho, fijaos si es asequible que hasta puede jugar solo una persona.
CONCLUSIÓN
Para ir terminando, os tenemos que repetir lo dicho: Allegados de Carthago es una sala con mucho encanto, eso no se puede negar de ninguna manera. Es sencilla, muy corta y a alguna gente le puede parecer incluso básica y simplona, pero la realidad es que es lo que se promociona.
Esta sala, como nos dijo el mismo dueño, es una sala honesta y consecuente: es corta, pero efectiva, por lo que la relación calidad-precio está totalmente acorde.
Nosotros la aconsejamos si sabéis a lo que vais. Eso sí, recomendamos un máximo de 4 personas (quizá alguna más si vais con peques), porque la experiencia está pensada para ese máximo. Caben más, pero poco podrían aportar. Aun así, como siempre, vosotros decidís. ¡A jugar!

Transporte publico:
Bus: líneas 5b, 7b, 9 y 14b.
Aparcamiento: Puede ser algo difícil, y lo que hay es de zona azul.