«Experiencia Roja» de Colors by Experiencity (Madrid)

Aprovechando que Risi de Escape Diem (El coleccionista de Arte y La Maldición del Romea) estaba por Madrid, decidimos jugar una escape room a la que le echamos el ojo desde su apertura. Éramos pocos para jugar la Experiencia Blanca de Experiencity, de modo que nos lanzamos de cabeza a la Experiencia Roja. En esta visita fue cuando nos enteramos de que Experiencity iba a abrir una sala de escape nueva, Experiencia Amarilla, ¡echadle un ojo también!

HISTORIA

Estamos de turismo en la Ciudad Prohibida de Pekín, pero no pensamos seguir el clásico circuito turístico precisamente. Nuestras intenciones van más allá, y tenemos planeado recuperar la máscara del emperador Qin Shi Huang. ¿Os suena? Fue el señor que mandó construir la Gran Muralla y que se enterró con cientos de soldados de terracota, ni más ni menos.

INMERSIÓN

Las puertas se abren y, a través de un pasillo, accedemos a la Ciudad Prohibida. Aunque en un principio la ambientación parece normalilla, cuando pasamos a la segunda habitación de este juego comenzamos a flipar; estamos en China. Y la cosa se mantiene según avanzamos. De lo mejor en ambientación que hemos jugado. ¡Y además la sala es enorme! Os recomendamos ir con calzado cómodo, porque vais a moveros bastante y en algunas partes el terreno pide deportivas. Es cierto que cuando fuimos había elementos que ya estaban desgastados, son muchos los aventureros que han intentado recuperar la máscara del emperador, pero el juego se renovó hace nada, de modo que si vais ahora os lo encontraréis nuevecito.

El game master no va a estar presente durante el juego, aparte de en las pistas. Eso sí, salió a saludarnos al finalizar la experiencia y pudimos hablar un buen rato con él y compartir nuestras impresiones. Simpatiquísimo, no tuvo problemas en enseñarnos los juegos que habían fallado y en hablarnos de Experiencia Amarilla. Además, tiene un papelazo en el siguiente punto: las pistas.

Las pistas se dan por megafonía. El game master se meterá en el papel de nuestro guía, un experto local que, pese a hablar en castellano, tenía un deje más que marcado de mandarín. El papel que interpreta aquí el game master es muy bueno, te ríes mucho y hasta puedes interactuar con él. Además, las pistas son útiles, así que si queréis pasarlo bien, pedidlas.

JUEGO

Los juegos son bastante originales, todo encaja a la perfección con la ambientación y la trama. En su mayoría son mecánicos, aunque os encontraréis algún candado normal. La combinación de ambos estilos queda bastante bien. La dificultad del juego es normal, aunque hay un puzle que puede que os cueste sacar. En general, es recomendable para todos los niveles. Hay elementos bastante originales que destacan dentro del juego y algún puzle enorme y vistoso. A grandes rasgos, tiene buen juego.

La fluidez es bastante buena, todo está bien hilado. Nosotros necesitamos solamente un par de empujones, sobre todo con elementos que estaban más ocultos. Excepto en algún punto al principio, todo sigue un esquema lineal, por lo que no vais a perderos. Pensamos que, dado el tamaño de la sala, esta opción ha sido muy acertada. Aunque la fluidez nos gustó, hubo dos o tres mecanismos que nos fallaron y restaron calidad a la experiencia. Luces que no se encendieron, básicamente. Pero, como os contábamos, en diciembre han reformado el juego y han contado con un especialista en mecanismos para reforzarlos. ¡Id sin miedo y disfrutad!