Ya son varias las salas que hemos hecho de La Fábrica, de modo que, aunque ahora sea en Benidorm, era nuestra obligación aprovechar que estábamos los cinco Gatomantes e ir a jugar El plan Vladimir.
Si tenéis curiosidad por sus salas hermanas en Altea, tenéis El laberinto de Harry, Game over, La cripta abandonada y Sherlock: objetivo Moriarty.
HISTORIA
Nuestro objetivo en esta ocasión es posiblemente de los más nobles que hemos hecho nunca: parar la Guerra Fría. Vladimir Chernobrob es un inventor bastante majo que pertenece a la orden de los Moustachelis y su objetivo es que entremos en su casa y encontremos, entre sus inventos, aquello que puede ser la clave para detener la guerra. La cosa es que, teniendo el oficio que tiene, no será fácil encontrar qué cosa es lo que nos pide, así que… Bueno, quizá con su ayuda podamos conseguirlo.
INMERSIÓN
La experiencia en esta sala comenzará no cuando entréis en el local, sino cuando paséis a la sala en sí misma. Sí es cierto que, para presentaros la historia, tendréis un vídeo nada más pasar al recinto, y bastante original, no lo podemos negar; sin embargo, nos habría gustado algo más inmersivo, algo que nos sirviera de calentamiento para lo que estábamos a puntos de encontrarnos. Aun así, no podemos quitarle todo el mérito. El vídeo, tal como está planteado, será relevante en la sala para diversos puzles.
En cualquier caso, la ambientación empieza sencilla y efectiva. El problema es que la última estancia nos trastocó los esquemas y no supimos encajar lo que se nos estaba contando con dónde estábamos exactamente. De todos modos, un punto a favor es que prácticamente todos los elementos que veréis forman parte de algún juego, aunque no hubiera tanto que mirar.
En cuanto al game master, adoptará el papel del dueño de la casa e irá dando las pistas siempre que las necesitéis. Lo hará a través de megafonía, de forma que todos los jugadores las podréis pedir y entender en cualquier lugar que estéis. Volviendo al papel del game master, se notó que le ponía ganas al cambiar el acento y fingir ser Vladimir, pero creemos que le falta rodaje y que podría jugar más con los jugadores, que siempre se agradece un poquito de interactuación.
JUEGO
Los puzles de esta sala, como viene a ser habitual en las últimas escapes que hemos jugado y que agradecemos mucho, son clásicos pero variados, de modo que, en ese sentido, dejará a todo tipo de jugador contento, siempre y cuando seáis entre 3 y 4 jugadores. No son especialmente numerosos y, en buena parte del juego, serán lineales.
Así pues, la fluidez puede tener altibajos importantes en caso de que os atasquéis con algún enigma, y más si tenemos en cuenta que algunos son bastante largos y no todos los jugadores pueden participar. En esos casos, seréis más un apoyo moral que un jugador al uso. Si fuera algo puntual, no importaría, pero ya os hemos dicho que son unos cuantos y, entre ellos, se encuentra el último, lo que hace que la sensación final de la experiencia no sea del todo satisfactoria.
Y ya que nombramos el final, nos dio la impresión de que era una sala inacabada. Quizá, cuando leáis esta reseña, ya hayan cambiado y sea una experiencia más completa; no obstante, nosotros no sentimos que fuera así. Con una vuelta a la idea original y, quizá, un poquito de humor, la sensación cambiaría enormemente.
CONCLUSIÓN
A ver, El plan de Vladimir de La Fábrica es una sala que puede servir como un buen inicio para aprender a jugar una sala de escape, aunque tenga cierta dificultad en algún puzle. El mayor problema, insistimos, es que nos dio la impresión de que era una sala inacabada. No obstante, solucionando algunos detalles, puede ser una sala interesante si se vive por la zona.
En cuanto al número de jugadores, nosotros, siendo 5, tuvimos varios momentos de parón, por lo que, si vais 8, como se supone que es el máximo de jugadores, es probable que la experiencia no sea del todo satisfactoria. Aconsejamos jugarla con un límite de 3 o 4 personas. Solo así conseguiréis tener la experiencia completa, así que ¡a jugar!
Avinguda Callosa D’Ensarrià, 17, 03502 Benidorm, Alicante
https://www.lafabricabenidorm.es/
info@la-fabrica.es
722 22 70 72
Transporte público:
Benidorm (Tram líneas 1 y 9) y autobuses urbanos L1, L7 y L13
Aparcamiento:
Depende de la época del año. Benidorm en verano tiene un aparcamiento difícil, pero hay un parking de tierra al lado de la estación de Tram, gratuito, que a nosotros nos hizo el apaño.